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"'Hotel Gondolin' es una invitación única al mundo trans sudamericano. Este libro retrata las vida en una pensión donde conviven más de 100 travestis y transexuales en el corazón de la ciudad de Buenos Aires. El hotel, cuya historia de lucha se forjó en los 90s es hoy refugio de decenas de travestis y transexuales que se acercan a la capital de Argentina. Es hogar. Es familia. A través de un trabajo de más de 8 meses, el editor y la fotógrafa Estefania d´Esperies visitaron semanalmente a las habitantes de este peculiar hotel, retratando sus historias." (publisher's note, © Paripe, 2015)
Interview with Verónica Dema:
"Hotel Gondolín, la pensión donde viven más de cien personas trans -
No hay travesti que no conozca el Hotel Gondolín, una especie de conventillo porteño, ahora autogestionado por las más de cien chicas que allí viven, que es un histórico lugar de recepción de quienes llegan del interior sin dónde vivir en Buenos Aires. Si uno transita a pie por la calle Aráoz a la altura del barrio de Villa Crespo, es imposible no ver este lugar de paredes azules en cuya vereda casi siempre hay alguna de las chicas sentadas en sillas plásticas que sacan como se acostumbraba antes (o como aún sobrevive en el interior del país).
Patricio Binaghi, productor, publicista y gestor cultural, recién llegado de España, donde vivió 14 año, se topó una tarde con este peculiar lugar que desde afuera le llamó la atención. Desde entonces no se detuvo hasta averiguar qué era el Hotel Gondolín, cuál era su historia, sus protagonistas. Su intención, les dijo a las chicas cuando se animó a tocar el timbre en el lugar, era retratar, homenajear ese espacio único en el mundo.
Con el sí de las chicas, convocó a la fotógrafa Estefanía d’Esperies para que hiciera el registro fotográfico documental. Las fotos son el alma de este libro, Hotel Gondolín, que editó Patricio con su sello Paripé Books. Estefanía hace 12 años que se dedica a la fotografía y este es el trabajo más documental de su carrera. El prólogo de este libro foto-testimonial es de la activista trans Marlene Wayar.
En esta charla con Boquitas pintadas los autores cuentan la experiencia y el aprendizaje que se llevan. “La actitud de las travestis, en general, es luchar y seguir para adelante, dándole la espalda a cualquier muestra de tristeza (como dice la canción de Fangoria)”, dice Patricio. “Las notamos con muchas ganas de vivir, de querer cambiar su situación, de mostrarle al mundo que ya se sienten incluídas en las leyes y que tienen el afán de hacerse respetar”, agrega su compañera.
- ¿Cómo surgió tu interés por esa casa?
- Patricio: La realidad es que estaba por el barrio y vi la vereda, la casa y el movimiento que generaban las chicas y me fascinó. En la vereda había varias chicas trans y travestis que entraban y salían, tomaban mate, charlaban, etc. Eso me llamó la atención. Consulté a una amiga que vive a la vuelta y me contó un poco la historia. Automáticamente supe que era un lugar especial y único en el mundo y me pareció interesante conocer cómo funcionaba, cómo vivían, la magia del lugar,etc.
- ¿Cómo fue el día en que te animaste a tocar esa puerta?
- Patricio: Soy una persona muy lanzada y fue simplemente ir a tocar el timbre. Me presenté y fui de a poco ganando su confianza, conociendo sus historias, fue escucharlas y manifestarles mi propia historia y qué era lo que queríamos lograr. Las intenciones siempre fueron sinceras y transparentes, a su vez se quería obtener un material desde el amor y el respeto. No queríamos hacer un libro en donde se busque el amarillismo, eso nunca me interesó. Lo único que me interesó es poder mostrar su historia, poder mostrar lo travesti y lo transexual desde otro lado, su lado humano. Estas chicas se levantan como todos a la mañana y tienen su vida, su lucha diaria, sus amistades, su familia, sus rituales, etc.
- ¿Cómo fue la presentación ya con la fotógrafa que te acompañaría en este proyecto?
- Patricio: Fuimos con Estefanía y les dijimos que éramos una fotógrafa y un editor independiente y que queríamos hacerle un homenaje al lugar y a ellas. Les dijimos lo que buscábamos y la forma de trabajar que teníamos. No queríamos lograr un realismo a lo Nan Goldin, instalándonos ahí a convivir con ellas 24 horas, y tampoco queríamos estar ahí como paparazzis. Queríamos lograr estar invisibles en determinados momentos y situaciones y estar visibles en otros y poder retratarlas a ellas y a su vida cotidiana. Y que las fotos que se publicarían tenían que estar aprobadas por ellas.
- ¿Qué sentís que expresan estas fotos, que quizá ni en palabras puede lograrse?
- Estefanía: Creo que el trabajo logrado es el que se fue definiendo a lo largo de varios meses, documentado la vida cotidiana de las chicas en el hotel, su rutina, sus modos. Creo que el libro refleja varios estados emocionales que fueron transcurriendo a lo largo de los meses, distintos estados, distintas chicas que iban abriéndose a ser retratadas, a ser observadas desde otro punto de vista.
- ¿Cómo fue ese trabajo diario? ¿Se instalaron ahí varias horas por día?
- Patricio: Fuimos al hotel todas las semanas durante ocho meses. El tiempo que nos quedábamos podía variar de acuerdo al feeling que sentíamos ese día y a la accesibilidad de ellas. Podíamos estar una tarde entera o media hora.
- ¿Cómo surge la idea de incluir a Marlene Wayar?
- Patricio: Una amigo lo sugirió y la empezamos a perseguir. Cuando le contamos la historia y las intenciones del libro, se emocionó y nos regaló un texto espectacular. Creo que el texto es algo histórico para lo que es el movimiento travesti en la Argentina. Le dimos total libertad para que escribiera lo que quisiera. Creo que en su texto se puede apreciar la intensidad, el desgarro, la actitud y la pelea de un colectivo que sigue luchando porque la sociedad lo reconozca y lo respete.
- ¿Cómo se organizan ahí adentro las chicas para convivir?
- Patricio: Es una especie de cooperativa donde los gastos se comparten y las tareas domésticas también. Están las que limpian, las que cocinan, las que organizan, etc. Marisita y Zoe, que son las más veteranas, ponen un poco el orden, y son las más respetadas por las chicas que viven allí.
- Cuando las ves, ley de identidad de género mediante, aún en la prostitución como modo de trabajo: ¿Qué sentís?
- Patricio: Ella luchan todos los días por salir adelante, hay algunas que están haciendo el secretariado, otras están terminando el bachillerato. Algunas trabajan de peluqueras, en tiendas y en donde la sociedad se lo permite. Por suerte están saliendo leyes que apoyan cupos para que tengan empleos públicos. Que la ley exista es importante, fue el primer paso que el Estado las reconozca y les de la identidad y el respeto que se merecen. Creo que los cambios culturales llevan un poco más de tiempo, pero de a poco vamos a empezar a verlos reflejados en la sociedad. Creo que hay una revolución trans y travesti a nivel mundial.
- ¿Qué manifiestan ellas con este destino a las que los condenó, de algún modo, su familia y toda la sociedad?
- Patricio y Estefanía: La actitud de las travestis, en general, es luchar y seguir para adelante, dándole la espalda a cualquier muestra de tristeza (como dice la canción de Fangoria). Las notamos con muchas ganas de vivir, de querer cambiar su situación, de mostrarle al mundo que ya no son excluidas por muchas leyes y también con afán de hacerse respetar.
- ¿Qué aprendieron luego de esta experiencia?
- Patricio y Estefanía: Esta experiencia ha sido para ambos muy enriquecedora. Ha sido un trabajo en equipo muy interesante, como así también extenuante. Haber logrado hacer este libro con mucho esfuerzo y poder editarlo de manera independiente nos llena de orgullo. No deja de ser una publicación pequeña y de sólo 500 ejemplares." (source: http://blogs.lanacion.com.ar/boquitas-pintadas/arte-y-cultura/hotel-gondolin-la-pension-donde-viven-mas-de-cien-personas-trans)
"'Hotel Gondolin' es una invitación única al mundo trans sudamericano. Este libro retrata las vida en una pensión donde conviven más de 100 travestis y transexuales en el corazón de la ciudad de Buenos Aires. El hotel, cuya historia de lucha se forjó en los 90s es hoy refugio de decenas de travestis y transexuales que se acercan a la capital de Argentina. Es hogar. Es familia. A través de un trabajo de más de 8 meses, el editor y la fotógrafa Estefania d´Esperies visitaron semanalmente a las habitantes de este peculiar hotel, retratando sus historias." (publisher's note, © Paripe, 2015)
Interview with Verónica Dema:
"Hotel Gondolín, la pensión donde viven más de cien personas trans -
No hay travesti que no conozca el Hotel Gondolín, una especie de conventillo porteño, ahora autogestionado por las más de cien chicas que allí viven, que es un histórico lugar de recepción de quienes llegan del interior sin dónde vivir en Buenos Aires. Si uno transita a pie por la calle Aráoz a la altura del barrio de Villa Crespo, es imposible no ver este lugar de paredes azules en cuya vereda casi siempre hay alguna de las chicas sentadas en sillas plásticas que sacan como se acostumbraba antes (o como aún sobrevive en el interior del país).
Patricio Binaghi, productor, publicista y gestor cultural, recién llegado de España, donde vivió 14 año, se topó una tarde con este peculiar lugar que desde afuera le llamó la atención. Desde entonces no se detuvo hasta averiguar qué era el Hotel Gondolín, cuál era su historia, sus protagonistas. Su intención, les dijo a las chicas cuando se animó a tocar el timbre en el lugar, era retratar, homenajear ese espacio único en el mundo.
Con el sí de las chicas, convocó a la fotógrafa Estefanía d’Esperies para que hiciera el registro fotográfico documental. Las fotos son el alma de este libro, Hotel Gondolín, que editó Patricio con su sello Paripé Books. Estefanía hace 12 años que se dedica a la fotografía y este es el trabajo más documental de su carrera. El prólogo de este libro foto-testimonial es de la activista trans Marlene Wayar.
En esta charla con Boquitas pintadas los autores cuentan la experiencia y el aprendizaje que se llevan. “La actitud de las travestis, en general, es luchar y seguir para adelante, dándole la espalda a cualquier muestra de tristeza (como dice la canción de Fangoria)”, dice Patricio. “Las notamos con muchas ganas de vivir, de querer cambiar su situación, de mostrarle al mundo que ya se sienten incluídas en las leyes y que tienen el afán de hacerse respetar”, agrega su compañera.
- ¿Cómo surgió tu interés por esa casa?
- Patricio: La realidad es que estaba por el barrio y vi la vereda, la casa y el movimiento que generaban las chicas y me fascinó. En la vereda había varias chicas trans y travestis que entraban y salían, tomaban mate, charlaban, etc. Eso me llamó la atención. Consulté a una amiga que vive a la vuelta y me contó un poco la historia. Automáticamente supe que era un lugar especial y único en el mundo y me pareció interesante conocer cómo funcionaba, cómo vivían, la magia del lugar,etc.
- ¿Cómo fue el día en que te animaste a tocar esa puerta?
- Patricio: Soy una persona muy lanzada y fue simplemente ir a tocar el timbre. Me presenté y fui de a poco ganando su confianza, conociendo sus historias, fue escucharlas y manifestarles mi propia historia y qué era lo que queríamos lograr. Las intenciones siempre fueron sinceras y transparentes, a su vez se quería obtener un material desde el amor y el respeto. No queríamos hacer un libro en donde se busque el amarillismo, eso nunca me interesó. Lo único que me interesó es poder mostrar su historia, poder mostrar lo travesti y lo transexual desde otro lado, su lado humano. Estas chicas se levantan como todos a la mañana y tienen su vida, su lucha diaria, sus amistades, su familia, sus rituales, etc.
- ¿Cómo fue la presentación ya con la fotógrafa que te acompañaría en este proyecto?
- Patricio: Fuimos con Estefanía y les dijimos que éramos una fotógrafa y un editor independiente y que queríamos hacerle un homenaje al lugar y a ellas. Les dijimos lo que buscábamos y la forma de trabajar que teníamos. No queríamos lograr un realismo a lo Nan Goldin, instalándonos ahí a convivir con ellas 24 horas, y tampoco queríamos estar ahí como paparazzis. Queríamos lograr estar invisibles en determinados momentos y situaciones y estar visibles en otros y poder retratarlas a ellas y a su vida cotidiana. Y que las fotos que se publicarían tenían que estar aprobadas por ellas.
- ¿Qué sentís que expresan estas fotos, que quizá ni en palabras puede lograrse?
- Estefanía: Creo que el trabajo logrado es el que se fue definiendo a lo largo de varios meses, documentado la vida cotidiana de las chicas en el hotel, su rutina, sus modos. Creo que el libro refleja varios estados emocionales que fueron transcurriendo a lo largo de los meses, distintos estados, distintas chicas que iban abriéndose a ser retratadas, a ser observadas desde otro punto de vista.
- ¿Cómo fue ese trabajo diario? ¿Se instalaron ahí varias horas por día?
- Patricio: Fuimos al hotel todas las semanas durante ocho meses. El tiempo que nos quedábamos podía variar de acuerdo al feeling que sentíamos ese día y a la accesibilidad de ellas. Podíamos estar una tarde entera o media hora.
- ¿Cómo surge la idea de incluir a Marlene Wayar?
- Patricio: Una amigo lo sugirió y la empezamos a perseguir. Cuando le contamos la historia y las intenciones del libro, se emocionó y nos regaló un texto espectacular. Creo que el texto es algo histórico para lo que es el movimiento travesti en la Argentina. Le dimos total libertad para que escribiera lo que quisiera. Creo que en su texto se puede apreciar la intensidad, el desgarro, la actitud y la pelea de un colectivo que sigue luchando porque la sociedad lo reconozca y lo respete.
- ¿Cómo se organizan ahí adentro las chicas para convivir?
- Patricio: Es una especie de cooperativa donde los gastos se comparten y las tareas domésticas también. Están las que limpian, las que cocinan, las que organizan, etc. Marisita y Zoe, que son las más veteranas, ponen un poco el orden, y son las más respetadas por las chicas que viven allí.
- Cuando las ves, ley de identidad de género mediante, aún en la prostitución como modo de trabajo: ¿Qué sentís?
- Patricio: Ella luchan todos los días por salir adelante, hay algunas que están haciendo el secretariado, otras están terminando el bachillerato. Algunas trabajan de peluqueras, en tiendas y en donde la sociedad se lo permite. Por suerte están saliendo leyes que apoyan cupos para que tengan empleos públicos. Que la ley exista es importante, fue el primer paso que el Estado las reconozca y les de la identidad y el respeto que se merecen. Creo que los cambios culturales llevan un poco más de tiempo, pero de a poco vamos a empezar a verlos reflejados en la sociedad. Creo que hay una revolución trans y travesti a nivel mundial.
- ¿Qué manifiestan ellas con este destino a las que los condenó, de algún modo, su familia y toda la sociedad?
- Patricio y Estefanía: La actitud de las travestis, en general, es luchar y seguir para adelante, dándole la espalda a cualquier muestra de tristeza (como dice la canción de Fangoria). Las notamos con muchas ganas de vivir, de querer cambiar su situación, de mostrarle al mundo que ya no son excluidas por muchas leyes y también con afán de hacerse respetar.
- ¿Qué aprendieron luego de esta experiencia?
- Patricio y Estefanía: Esta experiencia ha sido para ambos muy enriquecedora. Ha sido un trabajo en equipo muy interesante, como así también extenuante. Haber logrado hacer este libro con mucho esfuerzo y poder editarlo de manera independiente nos llena de orgullo. No deja de ser una publicación pequeña y de sólo 500 ejemplares." (source: http://blogs.lanacion.com.ar/boquitas-pintadas/arte-y-cultura/hotel-gondolin-la-pension-donde-viven-mas-de-cien-personas-trans)
- Ed(s)/Author(s)
- Marlene Wayar
- Book design
- Julián DUBIÉ
- Format
- HC (no dust jacket, as issued), 20,5 x 27 x 2 cm., 112 pp., 70 color ills., bilingual texts: Spanish / English (only the foreword), Ltd. to 500 copies